Muchos creen que el ayuno intermitente es solo un método para perder peso.
Nada más alejado de la realidad.
Este ayuno voluntario comprende otros beneficios importantes, como, por ejemplo, ayudar en el buen manejo de la diabetes tipo 2.
En este artículo te enseñamos cómo este patrón alimenticio te ayuda a mantener tu azúcar en la sangre dentro de los niveles deseados.
Según un estudio publicado en Medical News Today, el ayuno intermitente consiste en abstenerse total o parcialmente de comer durante un tiempo determinado, antes de volver a comer de forma regular.
Sin embargo, es sólo otra forma de restringir calorías durante el día y darle más tiempo al cuerpo para que se limpie y regenere sin tener que trabajar constantemente en la digestión de alimentos.
Es importante que el ayuno intermitente se planifique antes de empezar, porque ayuda a que nuestro organismo se adapte al cambio y obtenga los beneficios que buscamos.
Antes de ayunar se bebe abundante agua, dormir por lo menos de 7 a 8 horas diarias y alimentarse bien.
Debes consumir alimentos ricos en proteínas, vegetales, legumbres y pocos carbohidratos; ayunar no significa pasar hambre.
En una investigación realizada por la Universidad de Manabí en Ecuador, se ha visto que las personas que han realizado ayuno intermitente muestran resultados positivos frente a la diabetes.
A partir de la reducción de calorías aportadas por la dieta, se pudo ver una mejora de la sensibilidad a la insulina, que normalmente se da por el exceso de peso y falta de actividad física en la diabetes mellitus tipo 2. (2)
Según un estudio realizado en la Universidad de Zaragoza (3), las personas que realizan un ayuno intermitente, logran mejores resultados de glucemia (en ayunas) y glucemia postprandial (luego de las comidas).
Este efecto sucede como consecuencia de la mayor sensibilidad de los tejidos del cuerpo a la insulina, los valores de glucosa en sangre (glucemia) se regularizan.
Un estudio de la Universidad Católica de Valencia (España) concluye que el método de ayuno intermitente mejora enfermedades metabólicas, como la diabetes, directa o indirectamente.(4)
O sea, aumenta la sensibilidad a la insulina (hormona que se encarga de sacar a la glucosa de la sangre), y mejora la calidad de sueño (esto también estabiliza la glucemia).
De esta manera, se puede entender que todos los efectos beneficiosos sobre la diabetes, están relacionados entre sí.
El ayuno intermitente, acompañado de una nutrición adecuada, ayuda a mejorar considerablemente los valores de glucemia, los triglicéridos, la sensibilidad a la insulina y a controlar el peso corporal.
Sin embargo, el ayuno intermitente no implica por sí sola una remisión de la enfermedad.
La diabetes puede prevenirse, pero, una vez instalada, no es posible revertirla al 100 %.
Los alimentos deben ser naturales, no procesados, porque portan la fibra necesaria para disminuir el índice glucémico de una comida, aplanando la curva de glucosa postprandial.
Al ser alimentos naturales, no contienen aditivos, azúcar, conservantes, colorantes o saborizantes, que afectan el metabolismo del cuerpo.
En cambio, los ultraprocesados son productos alterados por la industria, diseñados para generar adicción en las personas.
El tratamiento nutricional debe ser acompañado por un profesional, ya que el ayuno intermitente genera cambios en el estado nutricional y en la composición corporal.
También es importante realizar exámenes básicos de laboratorio, para tener un mejor control y evaluar el funcionamiento del organismo frente al ayuno intermitente.
Hemos aprendido qué es el ayuno intermitente y cuáles son sus beneficios para el buen manejo de la diabetes tipo 2.